Hoy me di cuenta de que todos somos un horrible cliché. Que más que interactuar y aplicar papeles y máscaras con el mundo que nos rodea, sobreactuamos, somos farsantes. Ya nadie nos cree. Ni nosotros mismos ni nuestros mejores amigos. Estamos solos y exageramos. Nos convertimos en bufones de los otros y ellos de nosotros. Que lento, que estúpido, que patéticos.

Hoy me di cuenta de que aquellos que parecían gentiles, amables y chamanes se han perdido, se han ido. Se han convertido en malabarismo de onomatopeyas, en cacofonías de libertad artificial. Hoy me di cuenta de que perdí el respeto por lo que creía superior a mí y que tal vez en mi ego, en mi megalomanía, he superado al maestro.

Me han aburrido los grandes sabios del mundo. Todo aquel jurando que la verdad está en sus palabras y en un video bonito. En la prepotencia de la única razón, ortodoxa falsificación de poder. ¿Cuánto tiempo no preví esta charlatanería? Y los idiotas, al final han tenido la razón, la que no quisimos ver. Años pasaron desde mi encuentro con los falsos trogloditas borgianos; ahora me arrepiento de no haber prestado más atención.

Siempre uno cerca de la muerte aprende y recuerda algo. Epifanías de cincuenta centavos y hierbas toqueteadas por el kitsch y el sinsabor viejo de un hierbero, de una calabaza de mate sin un cebador profesional. ¿Cuántos años, siglos, nos hemos tardado en psicologizar a los perros? El epítome del ser humano: sanar el ánima animal.

Pretendemos que lo que hacemos es original y pretendemos crear rupturas en la conciencia pública. Nosotros no somos Hakim Bey y mucho menos agentes del caos. Somos pretensiones de unicidad que cansan al hablar. Somos odio e indiferencia entre protagonistas de cada película hedonista. Nadie será trastornado por una belleza brutal más que tu falsa autoestima.

He prometido a la virgen, exvoto tras milagros que creo sentir. Mater dolorosa, he visto tanto mal… He hecho tanto mal. ¡Que ignorancia la tolerancia! Sentirse humilde ante falsos profetas ha sido el peor de mis pecados, jamás miré de donde aparecía la paloma blanca. Caí muy bajo y al parecer es tarde para rectificar. ¿Será este el punto donde vi o veré la luz? ¿Habrá más allá después del inicio de semana? ¿Habrá amor? ¿Habrá algo más que esta triste apuesta con convicción de orador?

Pretensiones de Gingsberg y actores sobrevalorados por bellas sonrisas. Interpretaciones de aquello que se cree pretender, ni siquiera ser. Pero siempre, el bueno de la película. Yo prefiero a las locas y las putas que la doble moral del cínico con cara de ángel cocainómano. Yo prefiero aquella de la infección vaginal y la tristeza embarrada en el cuello. Yo prefiero al homosexual de closet que ama con pasión, y las lesbianas cristianas que se rasuran las axilas para encajar socialmente en la bella estética de portería, de revista “Teen Sport”, Sport Spice, Pepsi y futbol. Latinismos a la Salma Hayek y relojería armamentista.

Prefiero movimientos involuntarios y errores. Perder la conciencia para saber que se ha perdido todo, que solo quedan las buenas noticias debajo de la bata de un hospital, con el culo al aire y los tubos controlando tu cuerpo. Viajar no me sirve de nada si no huyo de los fantasmas, si revivo miradas de comadrejas y camaradas que piensan que el arte, la poesía y el comunismo salvarán de alguna manera y desde su liderazgo al mundo; y sobre todo, que todo debe ser como ellos crean que sea.

****: se dice “natzi” no “nasi”. Los alemanes y franceses son sensuales al hablar español. Pronunciando la “r” como un bello gargajo. Escupitajo en retretes de ideología escatológica. Jedis con obesidad exógena frenan el movimiento cerebral. Cefaleas de obscuridad y lipotimias que me recuerdan rasguños antiguos. Cicatrices de épocas salvajes.

Marchas de vaginas violentadas, liberadas y repletas de castigos divinos. Y tú, tú apenas eres un recuerdo forzoso. Una brisa con leve olor a meados. A triste esperanza de poeta maldito, que los reblogs de una página le recuerdan el pesar. Diálogos žižekianos preparados para impresionar hipsters. Lo posmoderno de un Manchester tercermundista y la bicicleta como justificación, como disfraz del ñoño, de aquel que sabe pero que igual es un loco con miedo y visiones conspiranoicas; con tanta incapacidad, con tanta tristeza y miedo a morir como cualquier otro animal.

Goffman se quedó corto, jamás miró Marimar; jamás tuvo perfil en Facebook, blog, ni presentó a Lady Gaga en los MTV. Vestidos de carne, así se describe el género humano: todos somos un artista pop. Preguntas perfectas para congresos de embaucadores, de gitanos sociales. De adivinos de tres pesos con beca del FONCA.

¿Enserio a los 30 años y dándote cuenta de la doble moral mexicana, renegando con cicatrices en las muñecas? ¿Cómo no me di cuenta antes de que lo que buscaba no estaba en este teatro? Cuanta pérdida de tiempo, cuánto desperdicié con sofistas y feministas que reúnen redes pro-ana en la clandestinidad de la diarrea polifacética y políticamente correcta.

Una de esas florecitas que creía solo crecían en mi pueblo, me cansas pequeña. Prefiero las sonrisas tachadas y los ojos cansados del escritor que juega billar. Poco tiene sentido y poco hay que hacer. He perdido el deseo de convivir con esta sociedad más no las ganas de estar vivo.

I used to Tumble my feelings away until you found my blog. My feelings are backlogged because you've got my URL on your homepage shortcuts next to Google and Pornhub.

I relish the days I used to subtweet you from the club. How I used to let
the bass drown out my thoughts as the beat dropped faster than my faith in you. In us.

I wish I could Insta this moment without worrying you'd see me with him. You ******* stalker get a life. Why are you holding on so tight? Quit covertly favoriting my pics, tweets and reblogs. I'm over it.

Status Update: I'm done with you. You can unfollow, delete and block me now because the only thing you're holding onto is the illusion of closeness. Outside this digital world I'm not a follower, a friend or a subscriber.

I'm the last good thing you had.

We live in a world where we show our affection
through likes, reblogs and shares.
we meet with friends just to stay at the same table
with smartphones in hands and smile casually at each other
gladly that we speak about moments and life
through pin pictures and tagging... stuff.

to get over writer's block,
write.
not for likes, reblogs,
views, or compliments.
just start.
with words
and nothing more.

losing that longing
for validation
is a liberating cry
that i wish could echo
through these hills,
into libraries
and classrooms
and that notepad
which remains blank
at your bedside.

There's nothing harder,
than watching the reblogs,
Of someone you love,
Talking about,
Crying about,
Relating to their unrequited love,
And I'm here,
"HELLO?"
Not waving,
Drowning.

everywhere i go, i've got my phone in my hand.
everything i do is documented
recorded in a profile for the world to see,
just for my own memory.
i plug myself in, charge up, and go,
selfies and tweets and reblogs galore
as i go about my life like a character
whose storyline is already in place.
my character arc is part of the way through,
and to complete it, i suppose,
i must stay connected.

Everything she wants is in her favorite things. It's in the songs she sings, the photos she reblogs, the movies she sees- she wants the tender, lengthy kisses she sees in films. She knows better than to expect it, but by God does she want it. The songs about adoration and indefinite love, about thinking she's a sight and lovely and beautiful, maybe even overwhelming and frightening- she wants it.

I want it. I want a mind-blowing love. And I want to hear about it. I don't want a silent lover; I want someone to yell about it from rooftops and sky scrapers to loud cities below.

I want a man who isn't afraid to tell me how he feels because he's afraid of losing me in the first place. I try to be this for others and I hope someday a man walks into my life and says, "My turn."

I know love isn't easy or picture perfect or always pretty, alluring or needed. But I love with my whole **** heart. I lay it out on the floor in your path to see if you'll run away, step on it, scoot around it or maybe pick it up and hand it back, saying, "Lay it down for someone else."

I want a man who will write the songs so they can be the soundtrack to our cinema of love and growth and adoration. It seems cliché, corny, unrealistic. Like a dream, like a fantasy. But why settle for an ordinary love? I want an out-of-this-world love that keeps me on my toes, keeps me with my wits, and keeps me alive. I want it to make my blood pump through my veins, I want it to make my blood boil. I want it in my veins, my eyes, my skin, my finger tips and *****. I want a man who lays his heart down in front of me, and asks for a trade.

She wants a love like the movies and songs. So, go give her a love that puts those **** movies and songs to shame. Kiss her as the sun comes up, kiss her as it sets. Hollow out her curves with your lips, kiss her where she likes herself least. Hold her. Remind her what she means to you, because she knows she's amazing and she won't wait for someone who doesn't show her that she is.

She is the song, the movie, the moment- now go sing of her, act alongside her, be alive with her. Do it. Just ******* do it. Love her with every ounce of your being, every molecule, because she's putting every fiber of her being into this and nothing more would light her up more than you loving her as much as she loves you.

******* internet,
Stop picking roses and asking me to ignore the thorns,
Cut off their heads,
Give me the thorns,
I don’t need to make myself smell sweet for you,
Empty head,
Brain dead,
Fill it up with faults in our stars and the perks of being a wallflower,
We all know ants can carry away common sense,
If there are enough of the *******,
But don’t peg me as a simpering idiot,
Sitting in the dark waiting for poetry to illuminate demise,
I’m not black and white, tears rolling, all alone,
Go **** your rusty razors,
I don’t need anyone to kiss my scars,
I am forty thousand thunderstorms,
I destroy what I want and I will always make you run for cover,
I will use all my energy to summon starving rain,
Just to make everything feel normal,
I have been my own casualty and I have been my own champion,
But victim isn’t in my vocabulary,
I never wrote wailings on white,
Or measured my problems in aesthetics and ‘reblogs’,
You are not ‘beautifully broken’,
Love is not masked by exquisite pain,
And I don’t believe in the charms of your never ending night,
Because the sun always rises,
And I would rather let it burn me up,
Then lurk in the shadows like you.