Amanecí con lápiz en la mano y el corazón en el otro lado.
Escribí la vision de un sueño un sueño nocturno de plumas negras agitado por tantas propagandas desgarrado por el sistema quede atrapado en montes de paja vacíos y huecos sin dejar nada, ni a nadie.
Aveces asqueado del poder de las palabras de un rey convencido de su propia desdicha busco al poeta de los sueños capaz de tomar riendas y hacer lo que todos saben y nadie hace lograr un despertar en las almas y corazones buscar justicia aplicar la ley tal y como es: