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Na ultima estrela do universo, Meu eu jaz adormecido
grite, grite, será em vão!
Não se pode acordar-me com gritos.
Mas o que fazer quando a distância não permite o tato
e o vácuo abafa os sons?
Peço-lhe que sussurre
sussurre mentalmente
talvez eu lhe acorde de meus sonhos!
The voice Aug 2020
When I was younger I told my mother
"Yo quiero ser como tu cuando crezca"
She kneeled down and said
"No"

I remembeer when I was younger
I looked up to my mother and I dreamed,
of the day I would grow up and be just like her.
She would always say "No"

Hasta que un día, me canse y le grite
"Cuando crezca voy a ser igualita a ti!"
She kneeled down and said
"Tu vas a ser mucho mejor que yo!"

I remember the first time I talked to my mom in english
"A mi me hablas en español!"

The first time I asked if I could go to a sleepover,
"Que no tienes casa o que?"

The first time I asked her permission to go on a fieldtrip
"Entonces para que te mando a la escuela?"

And the first time,
I told her I wanted to go to college,
"Pues a ver como le hacemos pero esta bien"

I remember her eyes, slightly dissapointed
Not at me, but at herself.
She wanted to give her daughter, only the best!

She wanted me to have the chances she never got

She wanted me to be better than her.

I don't remember:
A day that she didn't work
A day she didn't cook
A day she didn't say
"Echale ganas mija"

I do remember:
When she dropped me off at college,
She smiled and said,
"Eres como yo!"

"Eres como yo!"
Trabajadora,
Luchona,
No te rindes,
Humilde,
Sensilla,
Generosa,
Amorosa,
y Valiosa! "
A little something to introduce my mother to the world!
Iskra Silva Aug 2015
20.
A veces siento  cómo palpita mi corazón, siento todo
el dolor que martilla mi cabeza y que va carcomiendo mis deseos,
puedo olor la saturación de mi piel y escucho a mis
entrañas querer explotar, querer hacerse rojo tinta en la cama,
y en los oídos tengo un zumbido que me molesta todo el tiempo,
un zumbido que intenta arrancarme las orejas y ponerlas en un plato.

No puedo pensar con claridad, porque en mi cerebro
las ideas se extinguen y son sólo retazos de algún pensamiento vago,
¿cómo es que sigo de pie? Si no siento las piernas,
si parece que me las han cortado, igual que a mis brazos;
tampoco sé cómo escribo, ¿estoy escribiendo ahora mismo o tan sólo es la sobra inútil de una idea?

Estoy perdiendo los estribos, me estoy volviendo un
ser que no conozco, un ser que no puede centrar bien su cabeza
y que quiere marchitarse sin antes haber florecido.
Quiero paz, tan sólo quiero un momento de estática,
un momento en donde mi mente no grite con tanta locura
y donde la noche no se cole por todos mis poros y domine mis ideas.
Cuando siento que el raciocino me va a matar.
Con un trozo de carbón
con mi gis roto y mi lápiz rojo
dibujar tu nombre
el nombre de tu boca
el signo de tus piernas
en la pared de nadie
En la puerta prohibida
grabar el nombre de tu cuerpo
hasta que la hoja de mi navaja
sangre
              y la piedra grite
y el muro respire como un pecho.
Quiero vivir cuando el amor muere;
Muere, muere pronto, amor mío.
Abre como una cola la victoria purpúrea del deseo,
Aunque el amante se crea sepultado en un súbito otoño,
Aunque grite:
"Vivir así es cosa de muerte".

Pobres amantes,
Clamáis a fuerza de ser jóvenes;
Sea propicia la muerte al hombre a quien mordió la vida,
Caiga su frente cansadamente entre las manos
Junto al fulgor redondo de una mesa con cualquier triste libro;
Pero en vosotros aún va fresco y fragante
El leve perejil que adorna un día al vencedor adolescente.
Dejad por demasiado cierta la perspectiva de alguna nueva tumba
solitaria,
Aún hay dichas, terribles dichas a conquistar bajo la luz
terrestre.

Ante vuestros ojos, amantes.
Cuando el amor muere,
La vida de la tierra y la vida del mar palidecen juntamente;
El amor, cuna adorable para los deseos exaltados,
Los ha vuelto tan lánguidos como pasajeramente suele hacerlo
El rasguear de una guitarra en el ocio marino
Y la luz del alcohol, aleonado como una cabellera;
Vuestra guarida melancólica se cubre de sombras crepusculares
Todo queda afanoso y callado.
Así suele quedar el pecho de los hombres
Cuando cesa el tierno borboteo de la melodía confiada,
Y tras su delicia interrumpida
Un afán insistente puebla el nuevo silencio.

Pobres amantes,
¿De qué os sirvieron las infantiles arras que cruzasteis,
Cartas, rizos de luz recién cortada, seda cobriza o negra ala?
Los atardeceres de manos furtivas,
El trémulo palpitar, los labios que suspiran,
La adoración rendida a un leve **** vanidoso,
Los ay mi vida y los ay muerte mía,
Todo, todo,
Amarillea y cae y huye con el aire que no vuelve.

Oh, amantes,
Encadenados entre los manzanos del edén,
Cuando el amor muere,
Vuestra crueldad, vuestra piedad pierde su presa,
Y vuestros brazos caen como cataratas macilentas.
Vuestro pecho queda como roca sin ave,
Y en tanto despreciáis todo lo que no lleve un velo funerario,
Fertilizáis con lágrimas la tumba de los sueños,
Dejando allí caer, ignorantes como niños,
La libertad, la perla de los días.

Pero tú y yo sabemos,
Río que bajo mi casa fugitiva deslizas tu vida experta,
Que cuando el hombre no tiene ligados sus miembros por las encantadoras
mallas del amor,
Cuando el deseo es como una cálida azucena
Que se ofrece a todo cuerpo hermoso que fluya a nuestro lado,
Cuánto vale una noche como ésta, indecisa entre la
primavera última y el estío
primero,
Este instante en que oigo los leves chasquidos del bosque nocturno,

Conforme conmigo mismo y con la indiferencia de los otros,
Solo yo con mi vida,
Con mi parte en el mundo.

Jóvenes sátiros
Que vivís en la selva, labios risueños ante el
exangüe dios cristiano,
A quien el comerciante adora para mejor cobrar su mercancía
Pies de jóvenes sátiros,
Danzad más presto cuando el amante llora,
Mientras lanza su tierna endecha
De: "Ah, cuando el amor muere".
Porque oscura y cruel la libertad entonces ha nacido;
Vuestra descuidada alegría sabrá fortalecerla,
Y el deseo girará locamente en pos de los hermosos cuerpos

Que vivifican el mundo un solo instante.
Leydis Oct 2017
No es cosa de pecar,
es pecado no pecar conmigo…
de no besarnos,
de no aprobarnos,
de dejar este sentimiento como se deja un vicio;
con calculación,
con presura,
con odio y sin ternura.

No es cosa de pecar,
es falta de valentía, de osadía,
de interponer mil excusas
para encubrir nuestra falta de brío.

Te repito lo que te grite aquel día,
¡“si me vas a besar..que sea para idolatrarte”!
para impresionarte,
para encarcelarte,
para enjaularte en sentimientos no indecorosos.

Si el sentimiento de culpa te está corroyendo
pues, ven conmigo a confesarte,
faltaba más, ¡seguro que te absuelvo!
con un beso que perdona,
con un abrazo que implora,
con una mirada que conmueve,
con un roce que enternece,
con unas manos que enloquecen.

Si vas a pecar…ven, arrepiente conmigo,
reprenderé tu forma básica de amar,
te enseñare acatar las reglas de un amor sin ordenanzas;
un amor en confianza,
un amor sin penuria,
un amor en renovante abundancia.

No hay nada más que hablar,
si quieres pecar,
si necesitas arrepentirte,
si quieres absolución,
si necesitas de mi religión,
aquí estoy yo..dispuesta y libre!!!

LeydisProse
10/6/2017
https://www.facebook.com/LeydisProse/
Daniii Jun 23
El silencio es eterno,
porque no necesita tiempo
para existir.
No se mide en minutos,
se mide en lo que pesa
cuando nadie lo ve.

Está ahí,
esperando que cierres los ojos
y te atrevas a escuchar
lo que siempre estuvo.

El silencio no muere,
porque nunca nació.
Simplemente está
desde antes de vos
y seguirá
cuando ya no digas más nada.

A veces lo confundimos con la soledad,
pero no es lo mismo.
La soledad es ausencia de otros.
El silencio, en cambio,
es presencia de uno mismo.

Callamos no por falta de palabras,
sino por exceso de verdades
que no saben vestirse de sonido.
Y cuando eso pasa,
el silencio se convierte en espejo:
te muestra lo que sos,
lo que fuiste,
y lo que nunca vas a poder decir.

Hay silencios que abrazan.
Otros, que arden.
Y algunos, como el mío,
se quedan a vivir en el pecho,
como si fueran parte del cuerpo
aunque nadie los vea.

El silencio no es cobardía.
Es sabiduría sin aplausos.
Es entender que a veces
lo más profundo no se comparte…
se guarda.
Se lleva.
Se respira como si fuera parte del aire.

Y aunque el mundo grite,
aunque todo sea ruido,
hay un rincón en mí
donde siempre reina el silencio.

No porque lo elija,
sino porque me habita.

Porque soy más verdadero
cuando no digo nada.
Y porque en este mundo que exige respuestas,
yo prefiero ser
la pregunta que nunca se formula,
el eco sin voz,
el pensamiento que nunca se atrevió a salir.

El silencio es eterno.
Y quizá,
yo también lo sea
en él.

Derechos de autor ©️
~Daniii
Daniii Jun 19
La tristeza no grita.
Te lo juro.
Sólo se sienta a fumar en la esquina del alma
y te mira con los ojos rotos.

No hace escándalo.
Te acompaña callada,
como una sombra que aprendió a no pedir permiso
para quedarse.

Se esconde detrás de los "todo bien",
en el "jajaja" escrito sin ganas,
en las miradas que no saben dónde caer
porque el mundo duele hasta en los ojos.

Nadie la escucha,
pero todos la ven.
En la forma en que te abrochás la campera como si fuera armadura.
En los audios que grabás y no enviás.
En el celular que suena menos que tu corazón.

La tristeza no rompe platos,
pero rompe rutinas.
No destroza puertas,
pero te deja con el alma descuadrada.

Te hace dormir tarde
y despertarte sin ganas.
Te convierte en actor de tu propia vida.
Sonreís, sí. Pero es teatro.

Y lo peor es que nadie lo nota.
O peor aún:
lo notan
y miran para otro lado.

La tristeza no grita.
Pero tiembla en tus manos.
Se arrastra en tus silencios.
Y llora en voz baja cuando nadie mira.

Y vos,
que te volviste experto en disimular,
sabés que no se cura con abrazos flojos
ni frases de Instagram.

Se cura con presencia.
Con alguien que se quede
aunque no sepas qué decir.

Porque aunque no grite…
la tristeza se nota.
Y si alguien te ve,
te salva.
Daniii Jul 8
¿Quién soy,
si cada pensamiento que tengo
muere apenas nace?

¿Soy el que piensa,
o soy el que escucha al que piensa,
o soy el que duda de ambos?

Camino por el mundo
con la certeza de que todo es incierto.
Y cuando toco una verdad,
se deshace entre mis dedos como ceniza de un fuego que nunca vi.

¿Y si la realidad es un sueño
de un dios que ya se olvidó de soñar?
¿Y si somos notas sueltas
de una canción que nunca llegó a escribirse completa?

A veces creo que la muerte
no es el final,
sino el despertar.

Y esta vida…
¿no será acaso el insomnio del alma?

La gente habla de libertad
pero vive encadenada a nombres, a cuerpos,
a rutinas que llaman “vida”
como si eso alcanzara.

Yo no quiero sentido.
Quiero saber quién lo puso ahí.
Quiero encontrar al que escribió las reglas
y preguntarle por qué las hizo tan rotas.

Porque amar duele.
Pensar duele.
Ser… duele más.

Tal vez por eso existen las palabras,
para que el alma grite sin romper el cuerpo.

Tal vez por eso escribo,
para dejarle a la eternidad
una pregunta sin respuesta
con mi nombre debajo.

Derechos de autor ©️

~Daniii
VozSilente Jul 12
Tengo, el corazón de un dramaturgo y mente de poeta,
a veces pienso así, cuando los temblores del corazón vienen a mí,
y los demonios de la cabeza carcomen mi mente,
creo que estoy demente al escribir sobre lo que me quita la vida,
no hay salida, solo un yo, y solo yo a la intemperie.
Dejé de pensar y hablé conmigo, me di cuenta que no soy mi amigo,
¿qué irónico, no?
Traté de encontrarme con alguien dentro de mí que piense como yo,
que no me diga lo que ya sé, que me mire, que me grite, que me escuche.
Miedo, angustia y dolor, solo a esos yo encontré.
“Sólo déjame mirarte”, le dije a mí, mientras veía el espejo.
En mis ojos, no había reflejo bueno.
No sé qué decirme a mí mismo.
Fuerte y feliz, soy así.
Me comporto y nos comportamos de esa manera para no mostrar
algo que arruine el pensamiento de otros.
Algo triste me devora y puedo describirlo.
No soy la víctima que creo que soy.
No comprendo, Señor, ¿por qué soy así?
¿Duele pensar o duele morir?
¿Cuál soy, Señor de todos los reflejos? ¿Quién soy?
Mis sentimientos no los entiendo.
Triste en un día normal y sonrío cuando me siento fatal.
Háblame, Señor.
Duele ser algo que no comprendo.
Mis dolores hablan, yo hablo y solo siento puñales que silencian mi boca.
Sé que no, sé que yo no soy nadie, lo sé.
Soy tan monótono y no puedo escapar de mí.
Es una prisión impenetrable, creada por mí.
Hoy muere mi letra delante de la hoja, mientras la mente se enoja
y arroja todo por la ventana de mis ojos.
¿Cuál es mi yo?
¿Y cuándo parará de llover en la pradera de mis ojos?
Hoy no sé quién es yo.
Sólo déjame mirar por una vez, quién soy.
No escribo para ser entendido por todos,
escribo porque necesito sentirme entendido,
y si alguien siente algo al leerme, entonces no estoy solo.
Daniii 2d
El dolor…
sí, duele.
Y no hay forma bonita de decirlo.
No hay metáfora que lo disimule
ni verso que lo endulce.
Duele.
Y punto.

Duele como cuando te caés
y nadie extiende la mano.
Duele como amar
y no ser correspondido.
Duele como crecer…
porque crecer siempre es perder algo.

Y vos te preguntás:
¿Por qué a mí?
¿Por qué ahora?
¿Por qué así?

Pero el dolor no responde.
Solo se queda,
como un huésped oscuro,
haciéndote compañía
cuando todos se van.

Te rompe.
Te parte.
Te deja solo
en medio de una tormenta que no sabías que llevabas dentro.

Pero entonces pasa algo.

Un día, entre tanta ruina,
te encontrás a vos mismo
juntando pedacitos.
Sin darte cuenta,
estás reconstruyéndote.

No como eras antes.
Sino más verdadero.
Más real.
Más vos.

Porque el dolor no viene a destruirte,
viene a despertarte.

A mostrarte quién sos
cuando ya no hay máscaras.
A revelarte lo que valés
cuando nadie te aplaude.
A enseñarte que no necesitás tanto
para ser todo.

Y ahí entendés:
el dolor duele mucho,
sí.
Pero enseña.

Te enseña a ser fuerte sin endurecerte.
A llorar sin avergonzarte.
A caer sin rendirte.

Te enseña a perdonar
a quien no pidió perdón,
a soltar lo que amabas,
a seguir aunque todo te grite que te detengas.

Te enseña que no todo vacío es malo,
que no toda herida es eterna,
que no todo lo que termina
es una pérdida.

El dolor…
te convierte en fuego,
en ceniza,
y en renacer.

Y vos, que pensabas que no ibas a poder,
te encontrás de pie,
con el alma un poco más arrugada,
pero mucho más sabia.

Porque al final de todo…
el dolor no te destruye.

Te revela.

Derechos de autor ©️

~Daniii

— The End —