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Hombres veo que de hombres
sólo tienen, sólo gastan
el parecer y el cigarro,
el pantalón y la barba.

En el corazón son liebres,
gallinas en las entrañas,
galgos de rápido vientre,
que en épocas de paz ladran
y en épocas de cañones
desaparecen del mapa.

Estos hombres, estas liebres,
comisarios de la alarma,
cuando escuchan a cien leguas
el estruendo de las balas,
con singular heroísmo
a la carrera se lanzan,
se les alborota el ano,
el pelo se les espanta.
Valientemente se esconden,
gallardamente se escapan
del campo de los peligros
estas fugitivas cacas,
que me duelen hace tiempo
en los cojones del alma.

¿Dónde iréis que no vayáis
a la muerte, liebres pálidas,
podencos de poca fe
y de demasiadas patas?
¿No os avergüenza mirar
en tanto lugar de España
a tanta mujer serena
bajo tantas amenazas?
Un tiro por cada diente
vuestra existencia reclama,
cobardes de piel cobarde
y de corazón de caña.
Tembláis como poseídos
de todo un siglo de escarcha
y vais del sol a la sombra
llenos de desconfianza.
Halláis los sótanos poco
defendidos por las casas.
Vuestro miedo exige al mundo
batallones de murallas,
barreras de plomo a orillas
de precipicios y zanjas
para vuestra pobre vida,
mezquina de sangre y ansias.
No os basta estar defendidos
por lluvias de sangre hidalga,
que no cesa de caer,
generosamente cálida,
un día tras otro día
a la gleba castellana.
No sentís el llamamiento
de las vidas derramadas.
Para salvar vuestra piel
las madrigueras no os bastan,
no os bastan los agujeros,
ni los retretes, ni nada.
Huís y huís, dando al pueblo,
mientras bebéis la distancia,
motivos para mataros
por las corridas espaldas.

Solos se quedan los hombres
al calor de las batallas,
y vosotros, lejos de ellas,
queréis ocultar la infamia,
pero el color de cobardes
no se os irá de la cara.

Ocupad los tristes puestos
de la triste telaraña.
Sustituid a la escoba,
y barred con vuestras nalgas
la mierda que vais dejando
donde colocáis la planta.
Dante Rocío Jun 2020
A gun came up along the way.
Marrying you with the grave prematurely.
However, all that was needless,
As your father had already engaged you two before,
You’d been dead inside for oh so long.

Todd was right about that all along,
More perceptive than the rest.

How ironic and grotesque:
a fire burning so truly and strongly was put out
with a single blow,
How the greatest few hours of your life were made gradually
into your worst and, eventually, your end.

And how is that fair?

The curtains have been drawn,
The audience is long gone,
Yet your act won’t be in vain,
Not if I have something to say.
No, most certainly not!

You’ve become the greatest proof for all those fools
Of the power of the living word,
Of the power of a rebelled voice,
Of the immortal art of a being of poetry,
who’s the true soul of the universe.
Keating’s work became fulfilled in your choices,
The very fruit of his teachings.
You showed those mortals, that no matter
what they claim, do or inflict on you,
they could never **** you.
Neither rules, nor words nor the trigger.
You’re the champion, you’re the winner.

Altogether, we became Poetry ourselves.
No quills, paper or audience were needed,
just the world around us, our voices and passion in our eyes.
We gained the upper hand in the process of the withering,
Weaving ourselves into the tether of all the matters.
Now, no grave or unwritten memories shall restrict us or make us perish.
Never more, as art has no rules.

With all due respect, I give you back
your rightful laurel wreath.
With all your greatness you deserved that prize,
of meaning greater than just a crown of an actor;
The victory over others’ power,
Over fear to speak,
Over fear to sing,
Over fear to be.

You were a misunderstood artist, though not like those, that are many of them.
Your amalgamation of all that you were,
Though so harshly interrupted on that fateful night,
made the authorities and that cold academy see,
That it is them who let you down, not you,
That they can never quench
the call of the Life,
the truth whispered up there
among the trees,
A soul’s thriving beauty, in all the madness of the existence

The curtain’s fallen,
The audience is long gone,
But I shall commemorate you forevermore,
As a poet and artist of the Life owes it
to another of their kin.
With all the pride, honour and bitterness,
You are more than welcome,
as a true member,
in the Dead Poets Society.
- - -
As I let quote myself
in this gender observation,
based on the B. Sáenz work:
“Por eso lloramos,
Por eso reímos,
Por eso se alborota
nuestro corazón,
Y por eso vivimos”
An elaborated epitaph for the person of Neil Perry from the cinematic masterpiece “Dead Poets Society”
A minute of silence for all that perishes with one’s world’s departure.
I thank that story for rejuvenating my battle for the freedom and actual breathing, seeing and “poetising”.
Gather ye rosebuds while you may
Leydis Sep 2018
Nouvelles erótica

Usted desea una nouvelle
donde yo tomo el papel
de amante insaciable;
Que rompa sus cables,
Que hable con sus señales,
apagando sus raudales deseos
a base de besos con sabor a cerezo.
Astillar nuestros cuerpos
hasta que encontrar aliento,
mientras se esfuma la bruma
y mis miedos en su boca se
convierten en blanca espuma.

Usted me toma como núbil pupila,
Toma mi cintura como si supiera mi holgura,
Enjambra mi apetito y ultraja mis sentidos.
Me hace sentir mujer,
embriagándome en ese placer
de ser tomada por un hombre
que sabe la morfología de la pasión,
y no pide permisos y ni perdón,
y sin gentileza alguna toma posesión mis temblorosas piernas,
haciendo de ellas lo que usted quiera,
doblegando mi cabeza, la acerca y la aleja como desea, imponiendo su firmeza hasta estallar de conmoción.

Toma mi cuello como si del fuera su dueño,
Su boca insensata alborota mis plazas,
Su lengua canora le canta a mis magnolias,
Por primera vez sutilmente me abriga la aurora,
me abarca el ardor y en usted me acomodo
- como lo hace el sereno en la alborada.
Grito y clamo saber su nombre
mientras los soplos de su respiración
se descargan sobre mi cuerpo,
que busca encontrar alivio en su perdición.

Usted es mi desdoro,
Y no me importa tener honra
si habita su lengua en mi boca
Y me lleve a esos espacios
donde mi cuerpo revive en sus brazos.
********************­***
****************­*******You want a soap opera
where I take the role
of an insatiable lover;
That rips apart your shackles,
that speaks to your gestures,
that dims down your abundant desires
with cherry-flavored filled kisses…  
Splinting our bodies until
you find encouragement,
while the haze disappears and
my fears in your mouth become ivory spume.

You take me as a young novice,
Taking my waist as if I knowing my depth,
Widening my appetite and insulting my senses.
You make me feel like a woman,
Inebriating me in that insoluble pleasure
Of being made love to by a man who
knows the morphology of passion.
Who does not ask for permission
and, or forgiveness,
unkindly taking possession of my trembling legs,
controlling them as you wish,
manipulating my head, pulling closer
and then apart, while imposing
your firmness as you burst with excitement.

You take my neck as if you’re its owner,
your reckless mouth flusters my organism
as your harmonious tongue sings to my magnolias.
I am delicately shielded into the aurora,
Covered in heat and I nestle in your aroma
Wail to know your name
Whilst your breath discharges in my burrows
And I finally find relief in your perdition.

You are my dishonor,
I care not for morality
if your tongue resides within me
- taking me to those places
where my body is revived in your imposing essence.  

©LeydisProse
9/26/2018
https://m.facebook.com/LeydisProse//


¡Bien hayas oh lejano
y glorioso contento
de volver a mirarla!
                                      ¡Qué desgano
el del viaje de ahora, que me cubre
de una angustia de pésame!
                                                       
Presiento
la fuga del amor en este octubre.
Corre la antigua posta en la llanura
barrida por los cierzos de contino;
el sol avaro apenas si fulgura
sobre la paz de otoño del camino,
y con fúnebres sones
que se dilatan por la carretera
van entonando en la mañana austera
coplas de desamor los postillones.
(Fuensanta: cuando ingreso a tu azul valle
la ternura de ayer se me alborota,
pero yo le aconsejo que se calle.
Mi corazón es una cuerda rota).
Y te miro por fin... ¡Pero qué raros
se le aparecen a mi fe taimada
tu faz risueña y tus vestidos claros!
¡Oh, qué lejos te fuiste, enlutada!
Haces bien en reír de mis locuelas
ilusiones, ¡ay Dios!, de hacerte mía,
y en darlas un adiós, que es alegría
en el augurio de tus blancas telas.
En la zona en que muertas a cuchillo
mis esperanzas yacen hoy deshechas
¿no miras, dulce amada,
la pagana visión de un amorcillo
que me dispara sus ardidas flechas,
pero que va volando en retirada?
Tus ventanas, con pájaros y flores,
tus ventanas que miran al oriente,
están esclarecidas con la gracia
de la aurora riente
que con primicias de su luz decora
la virtud de tu frente.
Tus ventanas de antigua arquitectura
en que el canario, a trinos, alborota
la paz de tu silencio provinciano;
ventanas en que flota,
para embriaguez de los amantes fieles,
la desmayada ofrenda del perfume
de rosas y claveles...
Tus ventanas, Amor, de cuya clave
quise colgar la jaula de mi dicha
para que la cuidaras como una ave;
ventanas de madera
en que en vano soñé dejar prendida
mi devoción como una enredadera...
Tus ventanas que miran al oriente
y madrugan, fragantes, de limpieza
¿esperaron una alba,
de cándida belleza,
o el regreso del novio
que anda en tierras de olvido,
o esperaron, acaso,
el milagro de un sol desconocido?
Ventanas que rondé
en la alborada de mis mocedades,
rejas con agua, y luz, y caracoles
en que Ella gusta de escuchar el sordo
fragor de las marinas tempestades;
rejas dignas de célebres idilios,
rejas de mi noviazgo adolescente,
que yo os mire de nuevo
¡oh ventanas, abiertas al oriente!
los malos hábitos regresan
después de tu ausencia,
me recorren los pensamientos,
me gritan que no puedo seguir en esto,

pero ya no puedo,
no puedo salir,
no lo quiero,
no quiero su ayuda,

quiero la tuya,
que sigas buscándome
para sacarme de esto,
de este pozo
que has cavado sin quererlo,

en cómo caí
viendo cómo marchabas
sin fijarte en el resto,

no sé si me duele tu ausencia
o el presentimiento,

ya no duermo
por todo lo que siento,
me lo has dejado al descubierto,
vulnerable
al frente de un mundo
que ya no entiendo
y no te comprendo,

escucho tus pensamientos
desde la distancia,
me piden a gritos que me marche
mientras tus acciones me lo niegan,

o quizá no,
quizá solo soy yo,
quizá mis ojos
no pueden dejar de mirarte,
de pensarte,
de verte en todas partes,

no a ti,
no a tu cuerpo,
solo tu presencia
en mi cabeza,
como una brisa que me golpea,

ya no miro tus letras con orgullo,
sino con tristeza,

la cabeza se me alborota,
diciéndome que salga de esto,

pero dime de verdad
¿piensas que puedo?

lo he intentado,
he dado un paso
y he atrasado tres,

es una escalera del revés,
no lo consigo,
no avanzo,
no sin ti,
no sin tu mano
que me lleve al otro lado,

al mundo
donde se es feliz contigo,
abrazados como nunca,
con fuerza,
con amor,
con pasión,
sin guerras,
sin discusión,

con tu presencia,
pero no solo en mi cabeza,

déjame volver a tocarte,
a sentirte,
a sentir tu aliento,
tu calor,
tus ojos con pasión,
volver a verte a mi lado,

pero dime,
¿de qué nos sirve la ilusión?
ya no estás,
tengo que asumirlo,

y en cada calada
te prometo
que estará tu recuerdo
en el fondo de mi corazón
que sabes que lo tienes abierto,

pero recuerda:
ven a buscarlo
cuando el tuyo
este al completo

— The End —