Sin querer,
te di un beso amoroso bien suave.
Mirándote a tus ojos de luna,
que me decían, por favor un beso otra vez.
Te acaricié la piel y te dije,
vamos despacio esta ves.
La locura del momento no esperaba
lo que iba suceder.
Después de el beso,
nos miramos unos a otro con una sonrisa de placer.
Fue con una pasión intensa
que llegamos asta el amanecer.
Tus labios de miel,
nunca me olvidare.
Te di el beso de tus suenos
para que pronto nos veremos otra vez.
Por: Michael M. De La Fuente
Argentina