Submit your work, meet writers and drop the ads. Become a member
Natalia Rivera Mar 2015
7:15, viernes.
Era un viernes usual, llegue a su casa a eso de las 7:15; el cielo tenia pinceladas grises acompañado de una que otra estrella extraviada. Mientras observaba detenidamente, él se asoma por el balcón haciéndome un gesto de “entra” así que eso hice. Al entrar vi que en la sala no había nadie:
- ¿Dónde están tus padres? Le pregunte confundida
- Salieron a visitar a mi abuela.
Entre en su cuarto, el cual es demasiado espacioso para una sola persona. En las paredes cuelgan sus pinturas o algunas fotos de nosotros, en la esquina esta su computadora con los papeles compulsivamente organizados. Esta su cama con algunos cojines y un viejo y horrible sofá color amarillo. Como de costumbre deje mis zapatos al lado de la puerta, las ventanas estaban todas cerradas, lo único que le daba ventilación al cuarto era un viejo abanico en el piso así que encendí el aire acondicionado. Fui de camino hacia la puerta y me detuve justo frente al espejo, parecía una demente. Tenía unos pantalones cortos color crema con una camiseta negra la cual tenía un pequeño bordado de flores. Me encontraba frente a mi doble tratando de ver si me veía gorda cuando siento su mirada, penetrando en mi piel así que sonrió al instante.
-¿Qué se supone que haces?
- Tratando de no verme gorda
Él se queda callado y al cabo de varios minutos se va y cierra la puerta. Y ahí me encontraba yo, en el cuarto de mi novio, el que fue bendecido con tanta paciencia que podía llenar una tapa de botella. Molesta, fui a apagar la luz y me tire en su cama, pensando en que sucedería después cuando sonido de la ducha me trajo de vuelta a la realidad así que decidí arroparme y tratar de dormirme.
  
8:20, viernes.

El sonido de la puerta me despierta, busco mi teléfono y son las 8:20. Sigo dormida y algo confundida así que no logro ver dónde está el así que permanezco acostada intentando sin conseguirlo despertar. La cama se baja y sé que él se sentó así que me levanto y encuentro su cara.
-¿Por qué no me dijiste que te ibas a bañar?
- Estabas ocupada pensando en babosadas, en cambio, yo necesitaba un tiempo para pensarte detenidamente. – comenzó a acariciarme el rostro y continuo- ¿Acaso no entiendes que no tienes que ser flaca para que te desee? No te das cuenta, pero te deseo cada momento que te veo, cada vez que te tengo quisiera poder hacer estas cosas. Intente preguntar qué cosas pero su boca me lo impidió. Comenzó a besarme lento, como si hubiésemos tenido toda la noche para besarnos, como si sus padres jamás fueran a llegar. Seguido de un vals de  caricias buscando más allá de mi ropa, comenzó a quitármela despacio, como si estuviera escribiendo una historia. Lo tenía desnudo frente a mí, era mío y por ese lapso de tiempo podía hacer lo que quisiera con él. Podía besar cada centímetro de su cuerpo, acariciarlo en las partes que quisiera con la velocidad que quisiera, sentía como se hundía en mi cuerpo, como su respiración se iba cortando, como íbamos perdiendo la cordura hasta estallar.
11:54, casi sábado.

Yacíamos uno encima del otro, sin movernos, despeinados, sudados, saboreando el fulgor que brotaban nuestros cuerpos. Podía sentir su corazón latir, entrelazaba su pelo entre mis dedos preguntándome que sería de mis noches grises sin él. No podía parar de mirarlo, porque sabía que era el con quien quería pasar el resto de mis días, quería dejarle saber que lo iba a amar hasta que el cielo deje de dar espectáculos en las tardes, hasta que cada rincón del océano sea explorado, hasta que mi corazón este seco. Y aun así, lo amaría desenfrenadamente.
carmel Dec 2020
Existe una melancolía hermosa y dolorosa en la idea de lo que pudo ser y no fue, en esos hubieras sueños perdidos en el aire, dulce espacio de la imaginación de vidas alternativas y metas truncadas.
2020 No te voy a poder olvidar
llegaste a crear espacios en mi, vacíos que me hicieron ver mi oscuridad
llegaste a encerrarme en mi en mi mente, en mis demonios, me diste espejos de amor y espejos de dolor, me entregaste a los maestros correctos en los momentos indicados.
me recordaste que en el pasado existe la puerta de mi infancia, mi refugio un lugar en honor al buen trabajo de mis papas, mis hermanos, mi familia.
2020 llegaste a romperme como hace tiempo no me rompia la vida, llegaste a abrirme para derramar agradecimiento

2020 me enseñaste a soltar expectativas de un futuro, a fluir y ver cada día como una nueva aventura, a agradecer esta broma de la vida con respeto y con risas surfeando el sufrimiento.
este año llegó a enseñArme a tener amor propio y cuidarme, a conocer mis límites y reconocer mis demonios ponerles nombre sentarme a solas con ellos a tomar té, a veces vino, a veces whisky, A decir no me juzgo y no espero nada de ti, no me juzgues que esto es lo que ahi y me ha costado a:os todo lo que ves, todo lo que en mi he construido para mi no para ti ni para  nadie que no llegue a este mundo a llenar las expectativas de nadie a quitar el ego y ser parte de algo más grande, a confiar en mí y el universo, sabes este 2020 es un aprendizaje de saber fluir.

A vomitar mis miedos, llorar mis traumas y pintar mis dolores. A ser un perfecto ser imperfecto, sin esperar más ni menos de mi ni de nadie, a tomar las cosas como son, y no como quisiera que fueran

este año aprendí la diferencia entre un amigo y un conocido, un abrazo a un saludo a distancia, una llamada, este a;o me enseñaste a no tener miedo a estar sola y en soledad gozar el vacío de mi ser, que si suelto mejores cosas llegan y si no llegan al menos me tengo a mi y eso de menos no tiene nada.

Este año aprendí que la paz mental, que el centro interior no se deja por nada ni por nadie, aprendi una leccion que no voy a olvidar, prefiero vivir en armonía sin estar despertando mis heridas y gozando aunque no todo este como “ debería de ser”

Aprendí a valorar la fragilidad de tocar la mano de un extra:o, toser en publico, compartir una cerveza, escuchar una multitud, ir a un concierto, besarme con extraños, hacer nuevos amigos, bailar en la multitud, ver a los ancianos sin miedo a enfermarnos

2020 has sido extrañamente uno de los años de más sanacion, quien diría que ocupaba una pandemia mundial para perderme y volverme a encontrar
Natalia Rivera Jun 2015
Quisiera guardar la aurora boreal  en una pequeña caja de cristal, y colocarla en mi tina.
Para que cuando me bañe, sea la luz tenue que me ilumine mi cuerpo.
Tomar las corrientes del río y echarles burbujas, que los cuatro vientos me las ponga a volar.
Pintar el cielo de verde y el suelo de turquesa.
Por mis venas corre el tequila y en mis oídos  tus cuadros me cantan la brisa de las praderas.
Miro el collar de estrellas que me hiciste, y el traje que siempre me quitaste.
La luna baja a besarme la ausencia de tus manos y me ahogo en el pensamiento de que te amo.
Dulce niño de ojitos morenos,me tienes en un embrujo.
Me revuelcas el alma con besos, y tus manos me hacen vivir el cielo.
¡Mañana de primavera! Vino ella a besarme, cuando,
del lado de la ribera por donde latía andando,
una alondra mañanera subió del surco cantando
«¡Mañana de primavera!»

Le hablé de la mariposa blanca que vi en el sendero.
Me miraba deleitosa esperando mi «Te quiero».
Y cediéndome la rosa, me dijo «¡Cuánto te
quiero,
no sabes lo que te quiero!»

En sus labios me guardaba tantos besos para mí.
Los ojos yo le besaba: Me dijo: «Son para ti.
Tú para quien te esperaba. Mis ojos son para ti
Tú para quien te esperaba».

La besé ciego de amores labios y ojos con quereres,
con tan preciosos fervores que me dijo: «¿Tú
no quieres
bajar al jardín? Las flores ayudan a las mujeres
cuando cuentan sus amores».

El cielo de primavera era azul de paz y olvido...
Una alondra mañanera cantó en el huerto aún
dormido.
Luz de cristal su voz era en el terrón removido...
¡Mañana de primavera!
Leydis Jun 2017
Dime que me quieres,
dime que de ganas mueres, por besarme hasta al alba,
de arroparme la duda,
entre versos y besos.
Besos en noches de locura,
versos que besan la luna,
que rompen silencios,
que rompen cordura.

Dime que mi piel
sin duda,
es el mejor poema que has leído.
Que no quieres inventarme letras, sino besos, caricias, noches de delicias.
Dime que enredado entre mis piernas quieres enloquecer.

Bésame la duda de entregarme otra vez.
Hazme el amor sin duda--
como lo hicieron el tango y Gardel.

Enrédame en tu pluma,
conviérteme en luna.
Has de mis dudas de amor
el mejor poema de amor, pasión  y locura.

LeydisProse
2/2017
https://m.facebook.com/LeydisProse/
William Jul 2017
¿Podrías besarme el rostro a pesar
de ser horrendo y tener
la cara llena de espinillas y granos?
Oh, mi pequeña puta, ésta
noche manché las sábanas sin querer,
de nuevo -lo lamento-, con mi sangrado nasal
descontrolado
y mi ***** desgraciado.
Ya no me molesto en limpiarme,
creo que hace tiempo dejó de importarme.
No tiene caso, nada lo tiene,
nada lo tuvo.
¿O sí?
Siento desapego, si te soy sincero, creo que
tengo un poco de miedo.

Quisiera que estuvieses aquí, tal vez así,
podría dormir.
Realmente, no quisiera morir.

A veces me pides que te cuente cosas
y la verdad, a veces sólo quisiera contarte
tus lunares.

Desencantado de estar
desencantado.
Ya no veo la hora
de ver la hora.
-Bien puedes amarme aquí,
que la luna yo encendí,
tú, por ti, sí, tú, por ti.
  -Sí, por mí.
  -Bien puedes besarme aquí,
faro, farol farolera,
la más álgida que vi.
  -Bueno, sí.
  -Bien puedes matarme aquí,
gélida novia lunera
del faro farolerí.
  -Ten. ¿Te di?
¡Canastito repleto de fresas!
¡Ay, si él estuviese
esta tarde conmigo en la mesa!

¡Tanto como gusta
de las últimas fresas redondas
que las lluvias de Marzo maduran!

Y después que las hemos comido,
lentamente besarme en los labios
que ellas ponen fragantes y vivos.

¡Oh cestito cestito de fresas
que forrado de pámpanos verdes
has traído la pena a mi mesa!

¿Dónde se halla a esta hora el ausente?
¿Con quién come? ¿Qué piensa?
¿Qué hace
que sabiéndome triste no vuelve?

¡Para qué habrán traído estas fresas!
¡Para qué quiero aroma en los labios
si él no está hoy a mi lado en la mesa!
Leydis Oct 2018
Anoche te sentí tan cerca,
fundida en remembranza,
la frustración me llevaba
a besarme a mí misma.

Sentía tu aliento en los bozos de mis brazos,
mis ojos cerrados perdidos en tu regazo,
en ese tiempo donde éramos amantes,
mi boca babeaba de tanto rebose,
mi famélico cuerpo perdido en tu siembra,
en tu tierra mojada nutriendo mi binza,
esperando que la cosecha brotara en tu boca.

Anoche tus labios mordían mis huecos,
rellenándolos de desquicia y arrobamiento,
mi pellejo temblaba de tanto esparcimiento,
deslizada sobre mi cama, con tu nombre y sin recurso.

Tus voz transportándome a tu guarida,
invitándome a circular la duna de tu piel anguila,
desnudar con mis labios tu madura exquisitez,
desvistiéndote una y otra vez, desordenando tu rigidez,
hasta que mi boca lograras despertar las gulas de tu ser.

Anoche mi cabeza te tomo de rehén,
me perdí en todos los sabores de tu ser.
Anoche sé que escuchaste mi llamado al universo,
mi boca sin saber besaba tu centro,
agitados respiros deshilaron mis sábanas,
perdido el control - me mordía y pellizcaba,
llamaba tu nombre, recordaba tus pampas.

Anoche recordé tu desenvoltura
al recorrer los alcores de mi cuerpo,
todas esas elevaciones, todos esos deslizamientos
por las vías de nuestros cuerpos,
sentí el calor de tu  boca susurrarme;
- - ¡te puedes rendir, haz llegado a la cumbre!

Quede confundidamente extasiada y en silencio..,
abrí los ojos para realizar, que acabamos de hacer el amor
aunque no estés a mi lado.  


LeydisProse
10/17/2018
https://m.facebook.com/LeydisProse//
Jorge Rangel Aug 2023
Lo sé; estoy seguro!
Si!; claramente te entendí.
sabes bien cómo trabaja mi mente
que prefiero rotundamente discernir.
Mas siendo conmigo honesto
Nunca creció una duda dentro de mi.

Lo sé; estoy seguro !
Otra vez lo pediste y yo me fui.
Esa primera vez no pensé nada.
La segunda ocasión, te justifique.
Hoy tengo que ser conmigo honesto
No hay duda alguna dentro de mí.

Lo sé; estoy seguro!
“Si yo, besarme te deje”
En esa frase me dijiste
que no lo hiciste por placer.
y siendo conmigo honesto.
No existió duda de eso,
Ni al besarme, en mi dudé.

Lo sé; estoy seguro!
Tengo claro en mi mente
Se muy bien lo que escuché
“Que si yo, te golpearía?
Con seguridad te respondí!
exigiendo la convicción
de serme honesto.
Te digo hoy!
nunca he dudado de mí.
Fuera, sonrisas y saludos,
vals, esnobismo de los clubs,
mundanidad oropelesca.
Pero al volver a casa, tú.

En el balcón, en la penumbra,
vueltos a los ojos al azul,
te voy buscando en cada estrella
del misterioso cielo augur.
¿Desde qué mundo me contemplas?
¿De qué callada excelsitud
baja tu espíritu a besarme?
¿Cuál el astro cuya luz
viene a traerme tus miradas?

¡Oh qué divina es la virtud
con que la noche penetra
bajo su maternal capuz!

Hasta mañana, salas frívolas,
trajín, ruidos, inquietud,
mundanidad oropelesca,
poligononales fracs, abur.
Y tú, mi muerta, ¡buenas noches!
¿Cómo te va? ¿Me amas aún?
Vuelvo al encanto misterioso,
a la inefable beatitud
de tus lejanos besos místicos.
¡Aquí no reinas más que tú!
Jorge Rangel Jul 2023
¿No se por qué dudo?
Si,claramente; te entendí.
También tu sabes como trabaja mi mente
que prefiero rotundamente discernir.
Mas siendo conmigo honesto
¿No se por qué dudo de mí?

¿No se por qué dudo?
Otra vez me pediste y me fui.
La primera vez no pensé nada.
La segunda vez justifique.
Esta vez tuve que ser conmigo honesto.
¿No se por qué dudo de mí?

¿No se porqué dudo?
“A ti besarme, te deje”
En esa frase me dijiste
Que no lo quisiste hacer.
Y siendo conmigo honesto
¿No se por qué dudo de mí?

¿No se porqué dudo?
Tal vez no creí lo que escuché.
¿No se por qué me hiciste la pregunta?
¿Que, si yo!; te golpearé?
Además sembró duda en mi mente
De todo lo que percibí.

— The End —