Escucho la lluvia sobre mi techo, qué dulce canta tu nombre Tus ojos me matan lento y gozo cada instante Podría perderlo todo, contigo yo ya lo tengo Me encanta tu amor sereno, regido por el silencio Me quema de adrenalina, el no saber si me amas Si piensas en mí acaso, cuando te levantas en la mañana ... Me pregunto cuántas millas tengo qué correr para quedarme entre tus labios.