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Borges May 2015
El bien de este diablo, se mantubo en un original plan, el de masturbarse y comer al mismo tiempo.

Tubiera que decirle que la marea, ya no era navegable y el aire se movia en absoluta, idiomas y plumas.

Acelerando una mano al escribir se mueve con dedos cargando, algo inesperado y insuficiente.

En el lugar cualquiera y el negocio de hablar, de manera obsesiva. Era ya la noche y el calido placer de otra manera, el absoluto, se escapa.

La idea de la pesa de metal obsesiva la otra mano al caminar, era bombola de otro lado aca.

El retorcijon era merecido y aplastado, en involucramiento.
Borges Apr 2015
El bien de este diablo, se mantubo en un original plan, el de masturbarse y comer al mismo tiempo.

Tubiera que decirle que la marea, ya no era navegable y el aire se movia en absoluta, idiomas y plumas.

Acelerando una mano al escribir se mueve con dedos cargando, algo inesperado y insuficiente.

En el lugar cualquiera y el negocio de hablar, de manera obsesiva. Era ya la noche y el calido placer de otra manera, el absoluto, se escapa.

La idea de la pesa de metal obsesiva la otra mano al caminar, era bombola de otro lado aca.

El retorcijon era merecido y aplastado, en involucramiento.

En esas ellas no eran doncellas sino mafiosas, se merecian una bala de oro en los ojos.
Vino el que yo quería
el que yo llamaba.
  No aquel que barre cielos sin defensas.
luceros sin cabañas,
lunas sin patria,
nieves.
Nieves de esas caídas de una mano,
un nombre,
un sueño,
una frente.
  No aquel que a sus cabellos
ató la muerte.
  El que yo quería.
  Sin arañar los aires,
sin herir hojas ni mover cristales.
  Aquel que a sus cabellos
ató el silencio.
  Para sin lastimarme,
cavar una ribera de luz dulce en mi pecho
y hacerme el alma navegable.

— The End —