Submit your work, meet writers and drop the ads. Become a member
atuknantu Nov 2014
Fue bueno verte
recordar el sentido de todo esto que llevo
solo cuando te tengo al frente puedo entenderlo
el resto del tiempo es solo
pensar, extrañarte, racionalizar

el instante en que puedo sentir tus labios
tu piel
tu cuerpo
no puedo describirlo
llámalo como quieras
pero recorrería el mundo entero y viviría mil vidas mas
solo para poder sentirlo de nuevo

Cielo
somos algo de otro mundo

pero en todo esto no caben dudas
ni miedos
ni incertidumbre ni inseguridad
y no me entiendas mal

pero es algo difícil despertar cuando
nos une un camino duro
un abismo que cruzar
y una linea muy delgada sobre la cual caminar

ayer después de que te fuiste subí a la montaña
estaba desconsolado
vacío
extraño
lleno de conflictos, de ruido, de venenos

te encontré en nuevo lugar
en los colores
en el aire ligero
en ese cielo que era como un mar *****
lleno de luces
embarcaciones con destinos venideros
caminos, contornos
como posibilidades
historias que vivimos o viviremos
puertos que nos esperan
personas que fuimos y que seremos

ese frío que sentía no estaba ahí de verdad
era solo tu ausencia
era solo miedo de despertar
de tu despertar
porque por un momento estuve convencido
de estar dentro de tu sueño
de sentir como tus ojos se cierran
y de estar navegando sobre ese mar

mientras tus manos dibujan los rasgos
de esa pintura,
la misma que tus ojos reflejan
sigo de pie en esa montaña
sobre nubes y abismos
sigo sintiendo frío
perdido entre esos caminos
esperando el día en que aparezcas de nuevo
sin dudas
sin incertidumbre
sin miedo
y yo pueda al fin cerrar los ojos
y compartir el sueño
dibujar tus rasgos
tomar tu mano
y contemplar
en esa misma montaña
como esa noche se vuelve día
como el azul inunda el cielo
y el frío es vencido
y la muerte es vencida
y el reflejo de nuestros ojos
no sea mas una pintura incompleta
sino una vida entera de sueños, mares, montañas abismos y colores
Andrea González Jun 2015
//
llego tarde y
me encuentro con:

carne, presencia,
frío en las manos
y sudoración burda.

Es el momento -me notifico-
es el reloj derretido y
adherido a mi cuello.

son los minutos, los pequeños segundos
tatuados en la mente, espesos desde un tiempo.

-no hay sombras que puedan ocultarnos-

-no hay palabras exactas para describirlo-
Luis Haller Oct 2014
No se lo que sentí...
No se cómo describirlo,
Es felicidad
enfrascada al vacío,
Y, al mismo tiempo,
Me encuentro perdido.

Agitado...
Un poco inestable.
Tratando de recuperar el aliento,
Que, no se por qué, me has quitado...

Preguntas que me vuelven
En contra mía.
Que me vuelven
un fantasma
Sentimientos afilados.
Vidrios rotos
Rasgando muy fondo

Tu eres el rastro
Del tesoro que perdí
Hace tiempo.
Pistas perdidas,
Pistas que invalídas

No se por qué me doy la espalda
Me rebano con una espada
Que se desliza despacio
Y hasta toca mi alma...

No se lo que sentí,
Pero supongo soy feliz
Yo te hubiera
Acabando matando...
Tengo, el corazón de un dramaturgo y mente de poeta,
a veces pienso así, cuando los temblores del corazón vienen a mí,
y los demonios de la cabeza carcomen mi mente,
creo que estoy demente al escribir sobre lo que me quita la vida,
no hay salida, solo un yo, y solo yo a la intemperie.
Dejé de pensar y hablé conmigo, me di cuenta que no soy mi amigo,
¿qué irónico, no?
Traté de encontrarme con alguien dentro de mí que piense como yo,
que no me diga lo que ya sé, que me mire, que me grite, que me escuche.
Miedo, angustia y dolor, solo a esos yo encontré.
“Sólo déjame mirarte”, le dije a mí, mientras veía el espejo.
En mis ojos, no había reflejo bueno.
No sé qué decirme a mí mismo.
Fuerte y feliz, soy así.
Me comporto y nos comportamos de esa manera para no mostrar
algo que arruine el pensamiento de otros.
Algo triste me devora y puedo describirlo.
No soy la víctima que creo que soy.
No comprendo, Señor, ¿por qué soy así?
¿Duele pensar o duele morir?
¿Cuál soy, Señor de todos los reflejos? ¿Quién soy?
Mis sentimientos no los entiendo.
Triste en un día normal y sonrío cuando me siento fatal.
Háblame, Señor.
Duele ser algo que no comprendo.
Mis dolores hablan, yo hablo y solo siento puñales que silencian mi boca.
Sé que no, sé que yo no soy nadie, lo sé.
Soy tan monótono y no puedo escapar de mí.
Es una prisión impenetrable, creada por mí.
Hoy muere mi letra delante de la hoja, mientras la mente se enoja
y arroja todo por la ventana de mis ojos.
¿Cuál es mi yo?
¿Y cuándo parará de llover en la pradera de mis ojos?
Hoy no sé quién es yo.
Sólo déjame mirar por una vez, quién soy.
No escribo para ser entendido por todos,
escribo porque necesito sentirme entendido,
y si alguien siente algo al leerme, entonces no estoy solo.

— The End —