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There were times I thought
about not thinking about it,
aborting its fruition.
One final hug,
one final glance,
the marble floor colder than before.
And that was it.

What felt so foreign felt so adoring,
what felt so right was so wrong.
My soul a frozen climber clinging for life,
unaware he’s freezing.
Starting first in his knuckles,
spreading through his veins,
finishing in his heart.

It was snowing,
two,
three feet at a time.


Each snowflake staring at me in desperation,
tacit gasps dismantled by the concrete.
if only I heard their heckles,
      their pains,
               their signs,
                       their wisdom.
What astute advice they gave I’ll never know,
but I thank each one.

I found love,
and gave it back.
Studied myself, and came right back.
It became its own fruition.
Me gusta ver el cielo
con negros nubarrones
y oír los aquilones
horrísonos bramar,
me gusta ver la noche
sin luna y sin estrellas,
y sólo las centellas
la tierra iluminar.

Me agrada un cementerio
de muertos bien relleno,
manando sangre y cieno
que impida el respirar;
y allí un sepulturero
de tétrica mirada
con mano despiadada
los cráneos machacar.

Me alegra ver la bomba
caer mansa del cielo,
inmóvil en el suelo,
sin mecha al parecer,
y luego embravecida
que estalla y que se agite
y rayos mil vomite
y muertos por doquier.

Que el trueno me despierte
con su ronco estampido,
y al mundo adormecido
le haga estremecer;
que rayos cada instante
caigan sobre él sin cuento,
que se hunda el firmamento
me agrada mucho ver.

La llama de un incendio
que corra devorando
escombros apilando
quisiera yo encender;
tostarse allí un anciano,
volverse todo tea,
oír como vocea,
¡qué gusto!, ¡qué placer!

Me gusta una campiña
de nieve tapizada,
de flores despojada,
sin fruto, sin verdor,
ni pájaros que canten,
ni sol haya que alumbre
y sólo se vislumbre
la muerte en derredor.

Allá, en sombrío monte,
solar desmantelado,
me place en sumo grado
la luna al reflejar;
moverse las veletas
con áspero chirrido
igual al alarido
que anuncia el expirar.

Me gusta que al Averno
lleven a los mortales
y allí todos los males
les hagan padecer;
les abran las entrañas,
les rasguen los tendones,
rompan los corazones
sin de ellos caso hacer.

Insólita avenida
que inunda fértil vega,
de cumbre en cumbre llega,
y llena de pavor,
se lleva los ganados
y las vides, sin pausa,
y estragos miles causa ...
¡qué gusto!, ¡qué placer!

Las voces y las risas,
el juego, las botellas,
en torno de las bellas
alegres apurar;
y en sus bocas lascivas,
un beso a cada trago
con voluptuoso halago
alegres estampar.

Romper después las copas,
los platos, las barajas,
y, abiertas las navajas,
buscando el corazón,
oír luego los brindis
mezclados con quejidos
que lanzan los heridos
en llanto y confusión.

Quisiera ver al uno
que arrastra un intestino,
y al otro pedir vino
muriendo en un rincón;
y otros, ya borrachos,
en trino desusado
cantar a Dios sagrado
impúdica canción.

Y mientras las queridas
tendidas en los lechos,
sin chales en los pechos
y flojo el cinturón,
mostrando sus encantos,
sin orden el cabello,
al aire el muslo bello.
¡Qué gozo! ¡Qué ilusión!
Luis Ramos Feb 2021
El juego de la vida

Ayer en tu cuarto encontré una caja...
La abrí y vi muchas fotos y postales,
también cartas y otros efectos personales.
Tal vez yo no debí abrirla, aunque tal vez...
tal vez eso era lo que tú querías.

Encontré tu juego de barajas que me enseñaste a jugar. Y escondido ahí vi un libro muy viejo. Este mismo que ahora leo....
Yo pensé que te conocía, pero realmente nada yo sabía.

No es secreto que el ser yo quien estuvo a tu lado, me hizo sentir como el menos indicado... y es que no sabes que las cosas en mi vida ya han cambiado.

Perdóname que solamente una vez te escribí. Y perdona que cuando vine, solo fue para verte partir.

Hoy el juego de la vida tu lo haz ganado,
El juego en que yo creí haber ya fracasado.
Pero gracias por enseñarme esa última lección, por que Coty sin saberlo... cambiaste tú mi corazón.
Written for a one beautiful woman. A loving nothing and grandmother. The embodiment of strength and love.

— The End —