La tierra no discute,
no es patética, no arregla cosas de antemano,
la tierra no grita, no se apura, no amenaza ni promete,
no discrimina, ni tiene fallas,
no se cierra a nada, no niega nada, no deja a nadie afuera,
de todos los poderes, objetos y estados que recibe, a ninguno deja fuera.