Viajar con ajo en tu regazo, mientras
te toco un rato y en la parada vomito
un pedazo
de mi corazón, que se
deshizo al caer.
Pantaleta, cantaleta, papelón
chupeta, y quería
seguir sacando similares,
pero recordé que
me iluminan tus tetas.
Aunque a veces me sienta mal y me falte inspiración,
siempre voy a terminar
acá.
Y perdón si estoy de nuevo acá.
-Pensé que habías preguntado por mí-.
No me vas a destrozar, ¿verdad?
No, el Sol hoy no explotará
y vos no huirás.
Te... Basta. No hace falta.
Ya lo sabes, lo sabías, desde
siempre.