Es una historia conocida, amigos,
todos la recordamos,
-viento del pueblo se perdió en el pueblo-
pero no ha terminado.Hace tiempo hubo un hombre entre nosotros,
alegre, iluminado,
que amó y vivió, cantaba hasta en la muerte,
libre como los pájaros.¡Qué bonito sería! Nace, escribe,
muere desamparado.
Se estudian sus poemas, se le cita,
y a otra cosa, muchachos.Pero su nombre continúa, sigue,
como nosotros, esperando
el día en que este asunto, y otros muchos,
se den por terminado.¡Qué bonito sería! Nace, escribe,
muere desamparado.