Mis días son grises,
pero hoy fue uno de esos días para mí.
Adonde me pega más fuerte que anterior.
Hoy me pegó más en la noche,
te extraño.
La rutina que teníamos,
cuando hablábamos juntos cada noche.
No debería extrañarte,
pero soy humana.
Lo admito, sí te extraño.

Y en este momento, mientras te escribo esto,
aunque sé que no lo vas a ver,
estoy llorando.
Llorando sola sin que nadie sepa y me mire.
Porque tenemos historia juntos,
momentos buenos y esas memorias no se quitan, se quedan grabada en la mente.
Pero tengo que luchar contra esos pensamientos
para poder olvidarte de la mejor manera.
No es fácil.
Y no me da pena decirte que sí, te extraño,
y me duele.