Te dije,”…eres amada” Respondiste. “…Por ti y mi familia” Te pregunté. (de mi insinuando) cómo supiste? Me contestaste. (Sonriéndome) “…Siempre lo he sabido” Mi dilema es recordar tus “No te creo” Que cambio? Te creeré? Y si lo hago. Será suficiente para que cuides mi corazón? Que opción más que creerte? Pues sobre todos los recuerdos Y sobre todas las dudas, existe solo una gran verdad. Eres amada.