Viajar con ajo en tu regazo, mientras te toco un rato y en la parada vomito un pedazo de mi corazón, que se deshizo al caer.
Pantaleta, cantaleta, papelón chupeta, y quería seguir sacando similares, pero recordé que me iluminan tus tetas.
Aunque a veces me sienta mal y me falte inspiración, siempre voy a terminar acá. Y perdón si estoy de nuevo acá. -Pensé que habías preguntado por mí-. No me vas a destrozar, ¿verdad? No, el Sol hoy no explotará y vos no huirás.
Te... Basta. No hace falta. Ya lo sabes, lo sabías, desde siempre.