Ay, Poesía, pero mira que eres difícil, aunque busco hallar los cánones que te rigen termino encontrándome un insondable arcano que al pensar que me acerco, se hace más lejano.
Eres tan inconsútil, intangible y etérea, creo atraparte en frases y huyes en la idea; cuando pienso que avisté la intuición onírica, me doy cuenta que se ha diluído la lírica.
Tan real cual vida, muerte o la Primavera te presentas además como una Quimera que intentamos esculpir en finas palabras, pero sólo por momentos, ya que te escapas, cuando por siempre quedamos insatisfechos al ver que no hilamos el vestido perfecto.