No busco que me quieras, no busco que volvamos a ser como antes, no busto tu mirada hacia mis ojos, no busco que nos complementemos como lo hacíamos, no busco tu mano en medio de la noche esperando a que esté ahí esperandome cuando realmente la necesite, cuando me despierte de una pesadilla. Esa pesadilla se volvería real al recordar que ya no estás. Pero en fin, ya no te busco. Ya no te busco porque es cansado. Es cansado esperarte con la idea de que vasa a volver cuando en realidad nunca va a suceder. Es cansado darte todo de mi y que tu solo me empujes al vacío una y otra vez. Es cansado buscarte porque nunca te voy a encontrar.