Me llamo pájaro Pablo, ave de una sola pluma, volador de sombra clara y de claridad confusa, las alas no se me ven, los oídos me retumban cuando paso entre los árboles o debajo de las tumbas cual un funesto paraguas o como espada desnuda, estirado como un arco o redondo como una uva, vuelo y vuelo sin saber, herido en la noche oscura, quiénes me van a esperar, quiénes no quieren mi canto, quiénes me quieren morir, quiénes no saben que llego y no vendrán a vencerme, a sangrarme, a retorcerme o a besar mi traje roto por el silbido del viento.
Por eso vuelvo y me voy, vuelo y no vuelo pero canto: soy el pájaro furioso de la tempestad tranquila.