Submit your work, meet writers and drop the ads. Become a member
Ah, tú, guardadora del mundo, dormida, preñada de la muerte, quieta. ¡Qué inútil es hablarte, hablarme!.
Hombre solo soy, quedé. Quedé manco, podado, a mi mitad quedé.

Aquí me muero. Porque los ojos de la muerte me han visto y giran alrededor cazándome, llevándome. Aquí me callo. De aquí no me muevo.
235
 
Please log in to view and add comments on poems