A instancias de mis amigos cuerdos y cautelosos que ya no saben si diagnosticarme prematuro candor o simple chifladura abro el expediente de mi optimismo y uno por uno repaso los datos
allá en el paisito quedó mi casa con mi gente mis libros y mi aire desde sus ventanas grandes conmovedoras se ven otras ventanas y otras gentes se oye cómo pasa aullando la muerte son los mismos aullidos verdes y azules son los que acribillaron a mis hermanos
los cementerios están lejos pero los hemos acercado con graves excursiones detrás de primaveras y ataúdes y de sueños quebrados y de miradas fijas
los calabozos están lejos pero los hemos acercado a nuestro invierno sobre un lecho de odios duermen sin pesadillas muchachos y muchachas que arribaron juntos a la tortura y a la madurez pero hay que aclarar que otras y otros los sueñan noche a noche en las casas oscuras y a la espera
la gente la ****** y la silvestre no los filatélicos de hectáreas y vaquitas va al exilio a cavar despacio su nostalgia y en las calles vacías y furiosas queda apenas uno que otro mendigo para ver como pasa el presidente
en la cola del hambre nadie habla de fútbol ni de ovnis hay que ahorrar argumentos y saliva y las criaturas que iban a nacer regresan con espanto al confort de la nada
ésta es la absurda foja de mi duro optimismo prematuro candor o simple chifladura lo cierto es que debajo de estas calamidades descubro una sencilla descomunal ausencia
cuando los diez tarados mesiánicos de turno tratan de congregar la obediente asamblea el pueblo no hace quorum
por eso porque falta sin aviso a la convocatoria de los viejos blasfemos porque toma partido por la historia y no tiene vergüenza de sus odios por eso aprendo y dicto mi lección de optimismo y ocupo mi lugar en la esperanza.