o es que existe un territorio donde las sangres se mezclan(de una canción de Daniel Viglietti)
Ya van días y noche que pienso pobre flaco y no puedo ni quiero apartar el recuerdo
no el subido al cajón a la tribuna con su palabra de espiral velocisima que blindaba los pregones del pueblo o encendía el futuro con unas pocas brasas ni el cruzado sin tregua que quería salvar la sangre prójima aferrándose a la justicia esa pobre lisiada
no es el rostro allá arriba el que concurre mas bien el compañero del exilio el cálido el silencio aquel buen parroquiano del boliche de la calle maipú fiel al churrasco y al budín de pan rodeado de hijos hijas yernos nietos ese flamante abuelo con cara de muchacho hablando del paisito con la pasión ecuánime sin olvidar heridas y tampoco quedándose en el barro siempre haciendo proyectos y eran viables ya que su vocación de abrecaminos lo llevaba a fundar optimismos atajos cuando alguno se daba por maltrecho
y a pesar de la turbia mescolanza que hay en el techo gris de la derrota nadie consiguió que tildara de enemigos a quienes bien o mal radiantes o borrosos faros o farolitos eran pueblo como él
y también comparece el vigilado por esos tiras mansos con quienes conversaba de cine libros y otras zancadillas en el hotel o escala o nostalgia de la calle corrientes
se que una vez el dueño que era amigo lo reconvino porque había una cola de cincuenta orientales nada menos que venían con dudas, abandonos harapos desempleos frustraciones conatos pavores esperanzas cabalas utopías
y el escuchaba a todos el ayudaba comprendía a todos lo hacia cuerdamente y si algo prometía lo iba a cumplir después con el mismo rigor que si fuera contrato ante escribano público no se puede agregar decia despacito mas angustia a la angustia no hay derecho
y trabaja siempre noche y día quizás para olvidar que la muerte miraba de un solo manotazo espantaba sus miedos como si fueran moscas o rumores y pese a las calumnias las alarmas su confianza era casi indestructible llevaba la alegria siempre ilesa de la gente que cumple con la gente
solo un imagen lo vencia era la hija inerme la hija en la tortura durante quince insomnios la engañaron diciendole que lo habian borrado en la Argentina era un viejo proyecto por lo visto entonces si pedia ayuda para no caer en la desesperación para no maldecir mas de la cuenta ya van noches y días que pienso pobre flaco un modo de decir pobres nosotros que nos hemos quedado sin su fraternidad sobre la tierra no se me borra la sonrisa el gesto de la ultima vez que lo vi junto a chicho y no le dije adios sino cuidate pero los dos sabiamos que no se iba a cuidar
por lo comun cuando cae un verdugo un doctor en crueldad, un mitrione cualquiera los canallas zalameros recuerdan que deja tres cuatro verduguitos en ciernes
ahora que problema este hombre legal este hombre cabal acribillado este muerto inmorible con las manos atadas deja diez hijos tras de si diez huellas pienso en cecilia en chicho en isabel margarita felipe y los otros que siempre lo rodeaban porque tambien a ellos inspiraba confianza y que lindos gurises ojala vayan poquito a poco entendiendo su duelo resembrando a zelmar en sus diez surcos
puede que la tristeza me haga decir ahora sin el aval de las computadoras que era el mejor de nosotros y era pero nada me hará olvidar que fue quien haciendo y rehaciendo se purifico mas en el exilio
mañana apretaremos con los dientes este gajo de asombro este agrio absurdo gajo y tragaremos seguirá la vida pero hoy este horror es demasiado
que no profane el odio a este bueno yacente este justo que el odio quede fuera del recinto donde estan los que quiso y que lo quieren solo por esta noche por esta pena apenas para que nada tizne esta vela de almas
pocos podran como él caer tan generosamente tan atrozmente ingenuos tan limpiamente osados
mejor juntemos nuestras osadías la generosidad mas generosa y ademas instalemos con urgencia fieles radares en la ingenuidad
convoquemos aquí a nuestros zelmares esos que el mismo nos dejo en custodia el que ayudo a cada uno en su combate en su mas sola soledad y hasta nos escucho los pobres sueños él que siempre salía de alguna pesadilla y si tendia una mano era una mano y si daba consuelo era un consuelo y nunca un simulacro
convoquemos aquí a nuestros zelmares en ellos no hay ceniza ni muerte ni derrota ni tierno descalabro nuestros zelmares siguen tan campantes señeros renacidos únicos y plurales fieles y hospitalarios convoquemos aquí a nuestros zelmares y si aun asi fraternos asi reunidos en un duro abrazo
en una limpia desesperación cada uno de esos módicos zelmares echa de menos a zelmar será que el horror sigue siendo demasiado y ya que nuestro muerte como diria roque en plena vida es un indócil ya que es un difunto peliagudo que no muere en nosotros pero muere que cada uno llore como pueda
a lo mejor entonces nuestro zelmar ese de cada uno ese que el mismo nos dejo en custodio a cada uno tendera una mano y como en tantas otras malas suertes y noches nos sacara del pozo desamortajara nuestra alegría y empezara a blindarnos los pregones a encender el futuro con unas pocas brasas