Esta tarde, frente a ti, en los ojos siento algo que te mira y no soy yo. ¡Qué antigua es esta mirada, en mi presente mirando! Hay algo, en mi cuerpo, otro. Viene de un tiempo lejano. Es una querencia, un ansia de volver a ver, a verte, de seguirte contemplando. Como la mía, y no mía. Me reconozco y la extraño. ¿Vivo en ella, o ella en mí? Poseído voluntario de esta fuerza que me invade, mayor soy, porque me siento yo mismo, y enajenado.