No he buscado poder ni metal, mas viví en una marcha nupcial... Me parece que por amar tanto voy bebiendo una copa de espanto.Claroscuro de noche y de día; corazón y cabeza y hombría, los tres nudos que tiene mi ser a la buena y la mala mujer.En mi pecho feliz no hubo cosa de cristal, terracota o madera, que abrazada por mí, no tuvieramovimientos humanos de esposa. ¡Desdichado el que en la hora lunar en su lecho no huele azahar!Desposémonos con la sencilla avestruz, con la liebre y la ardilla.