voces entre los dedos del sol sombra y luz casi líquidas Silba el carpintero silba el nevero silban tres fresnos en la plazuela Crece se eleva el invisible follaje de los sonidos Tiempo tendido a secar en las azoteas Estoy en Mixcoac En los buzones se pudren las cartas Sobre la cal del muro la mancha de la buganvilla
aplastada por el sol escrita por el sol morada caligrafía pasional
Camino hacia atrás hacia lo que dejé o me dejó Memoria inminencia de precipicio balcón sobre el vacío
Camino sin avanzar estoy rodeado de ciudad Me falta aire me falta cuerpo me faltan la piedra que es almohada y losa la yerba que es nube y agua Se apaga el ánima Mediodía puño de luz que golpea y golpea Caer en una oficina o sobre el asfalto ir a parar a un hospital la pena de morir así no vale la pena Miro hacia atrás ese pasante ya no es sino bruma
Germinación de pesadillas infestación de imágenes leprosas en el vientre los sesos los pulmones en el **** del templo y del colegio en los cines impalpables poblaciones del deseo en los sitios de convergencia del aquí y el allá el esto y el aquello en los telares del lenguaje en la memoria y sus moradas pululación de ideas con uñas y colmillos multiplicación de razones en forma de cuchillos en la plaza y en la catacumba en el pozo del solitario en la cama de espejos y en la cama de navajas en los albañales sonámbulos en los objetos del escaparate sentados en un trono de miradas
Madura en el subsuelo la vegetación de los desastres Queman millones y millones de billetes viejos en el Banco de México En esquinas y plazas sobre anchos zócalos de lugares comunes los Padres de la Iglesia cívica cónclave taciturno de Gigantes y Cabezudos ni águilas ni jaguares los licenciados zopilotes los tapachiches alas de tinta mandíbulas de sierra los coyotes ventrílocuos
traficantes de sombra los beneméritos el cacomixtle ladrón de gallinas el monumento al Cascabel y a su víbora los altares al máuser y al machete el mausoleo del caimán con charreteras esculpida retórica de frases de cemento
Arquitecturas paralíticas barrios encallados jardines en descomposición médanos de salitre baldíos
campamentos de nómadas urbanos hormigueros gusaneras ciudades de la ciudad costurones de cicatrices callejas en carne viva Ante la vitrina de los ataúdes
Pompas Fúnebres putas pilares de la noche vana Al amanecer en el bar a la deriva el deshielo del enorme espejo donde los bebedores solitarios contemplan la disolución de sus facciones El sol se levanta de su lecho de huesos El aire no es aire ahoga sin brazos ni manos El alba desgarra la cortina Ciudad montón de palabras rotas
El viento en esquinas polvosas hojea los periódicos Noticias de ayer más remotas que una tablilla cuneiforme hecha pedazos Escrituras hendidas lenguajes en añicos se quebraron los signos atl tlachinolli se rompió agua quemada No hay centro plaza de congregación y consagración no hay eje dispersión de los años desbandada de los horizontes Marcaron a la ciudad en cada puerta en cada frente el signo $
Estamos rodeados He vuelto adonde empecé ¿Gané o perdí? (Preguntas ¿qué leyes rigen "éxito" y "fracaso"? Flotan los cantos de los pescadores ante la orilla inmóvil **** Wei al Prefecto Chang desde su cabaña en el lago Pero yo no quiero una ermita intelectual en San Ángel o en Coyoacán) Todo es ganancia si todo es pérdida Camino hacia mí mismo hacia la plazuela El espacio está adentro no es un edén subvertido es un latido de tiempo Los lugares son confluencias aleteo de presencias es un espacio instantáneo
Silba el viento entre los fresnos surtidores luz y sombra casi líquidas
voces de agua brillan fluyen se pierden me dejan en las manos un manojo de reflejos Camino sin avanzar Nunca llegamos Nunca estamos en donde estamos No el pasado el presente es intocable