Encontré el amor, No amigo, no es relajo. Lo he encontrado en un zafacón abandonado. Si amigo, como la mujer que aborta a su hijo, Que lo forra en una funda y lo deja en el zafacón sangrando.
Así lo encontré, ahí tirado, abandonado. Tenía mala reputación, ya nadie quería cuidarlo. Apestaba su olor, hedía a heridas coaguladas.
Si amigo, fue pavoroso verlo ahí. Envuelto entre las suciedades del placer. Entre las decepciones del ayer. Entre los amantes escondidos. Entre las mujeres que solo se comprometen a la lujurias, sin la responsabilidad que tiene la esposa o “la esclava” como le dicen de broma! Ellas solo quieren gozo.
Si amigo, ahí lo encontré, Tirado en la pudrición del engaño. Entre agotantes mentiras Entre juegos de conquistas Entre la pobreza de almas sin vidas Entre la oscuridad del deseo Entre la perversión de lo prohibido Entre pasiones terrenales Entre los compromisos incumplidos Entre todo lo que se ha callado Entre la gente dañina. Entre todos los falsos nombres que le han puesto Entre besos desanimados Entre abrazos mal dados entre la Libertad de ****.
Si amigo, ahí estaba él, Todo indefenso, Nadie le cantaba una serenata Los poetas escribían solo para buscar otra conquista. Ya nadie quería saber de él. Tenía mala reputación.
Me zarandeó tanto amigo verlo ahí. Pensé recogerlo, cubrirlo en sabanas de satín. Bañarlo y perfumarlo y hablarle de Benedetti, de Jesús, De toda la gente que todavía lo quiere. De pronto recordé, que él me debe varias a mí, y ahí lo deje…….que se siguiera desangrando como el me dejo a mí!